Mar 26, 2008
ligas mayores
Lautriz usa el lápiz sólo para rascarse perplejamente la cabeza. No puede escribir. Lee y relee una frase, dos. En el cuadernito, transcritas unas palabras que han sido depositadas sobre la frente enfebrecida de su onomástico: mis dedos de pianista retirado te buscan en un lugar donde nunca llueve. Lautriz no puede. Lo sabe y pone a buen uso el instrumento: se rasca la cabeza. A este hombre no va a poder recrearlo con las palabras.
Mar 22, 2008
Mar 18, 2008
cocina
Te sentaste a comer nueces de la India en la barrita de la cocina. Estás enfermo. Llegamos anoche apenas. Mido media taza de azúcar y la vierto encima de un sartén grueso. Un día fuimos al cine y te enojaste mucho. Encuentro la palita de madera. No puedo mirarte, el caramelo es algo muy delicado. Estás ahí pero no me tocas. Me pregunto en voz alta si alguna vez te permití ponerme la mano en el rostro. Te quedas callado un rato y escuchamos cómo se derrite el azúcar. Siempre me dejaste, dices y entonces adivino que espulgas el bowl de nueces como si entre ellas fueras a encontrar algo más que decir. Retiro el sartén del fuego, agrego dos tazas de un vino que no vamos a compartir. Un aroma nos rodea. No sé cómo se sienten tus manos.
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