Jan 26, 2005

fuera de lugar

No fue ayer. Tal vez el lunes, cuando todavía la nieve sobre las aceras era blanca. Salió intempestivamente por una puerta que daba a la calle llena de gente. No sé como la ví, si todo fue tan rápido. Estaba mal puesta, ocupaba un lugar que no le correspondía, pero era ella. La reconocí por el rojo, por el café, por esa textura tan cálida, tan acogedora. Quise tomarla. Quise que volviera a estar sobre mi cuerpo para que después llegaras tú y la expulsaras de su sitio. Que tomaras primero una pierna y luego la otra y entonces...¿Por qué otra vez? ¿Por qué tengo que toparme con tu bufanda en esta ciudad en la que todo es desconocido excepto ella?