Sep 2, 2004

Intercambiable

Un verdadero alivio, esto de reconocerte en otras gentes. Sería fácil pensar que lo único que quiero es deshacerme de todo eso que me obliga a recordarte. No es así. Con gusto te encuentro en los gestos de alguien más y suspiro aliviada. No eres el único. No eras tan único como yo pensaba. Hombre repetido una, tres y mil veces en otros. En las palabras y las cadencias y las manías. En la seducción, también. En la conquista. Qué bueno saberlo.