Jul 12, 2005

duda

Escribí y escribí. Lo leí. Me di cuenta de que había resultado un texto distinto al que yo quería. Yo me propuse escribir sobre un taxista y al final acabé haciendo un homenaje cinematográfico a la memoria de nuestros ayeres. De ciertas tardes de nuestros ayeres. Le faltan muchas cosas. Hay que corregir bastante, pero no lo hice. La última línea la última línea. Entonces adquieres tus gestos de mujer glamurosa y volteas a mirarme en Constitución y fumas un poquito del cigarro imaginario y me dices la última línea de mi texto. De esto hace tanto. Entre marzo y mayo del año pasado. Leo y leo y sé que nadie más podrá leer el mismo texto que he escrito. Excepto tú. Tú que conoces los códigos y las referencias y las anécdotas.

¿Sería tan malo enviártelo?